El castillo de Vallgornera abre sus puertas como hotel boutique, que cuenta con 9 suites, un lobby que respira la esencia del castillo original y una piscina exterior que permitirá a los huéspedes disfrutar de momentos de conexión con la naturaleza del entorno. Los muebles históricos, cuidadosamente preservados a lo largo de los años, se combinan con elementos contemporáneos para crear un ambiente que une lo rústico y lo contemporáneo.
Con el fin de poder seguir uniendo el legado de la familia que regentaba el Castillo al Hotel Boutique, Oriol Roselló, arquitecto y fundador de Bangolo, ha sido el encargado de diseñar el proyecto. Roselló ha abordado la restauración cuidando la estructura del mismo, realizando las mínimas intervenciones posibles para preservar la autenticidad del Castillo y sorprender a los huéspedes desde el momento de su llegada.
“Nuestra misión era abrir la historia familiar a los huéspedes y trasladar el paso de todas las generaciones a los nuevos visitantes del Castell de Vallgornera. Para ello, era indispensable respetarlo al máximo en muchos sentidos: en su estructura y en el interior, con sistemas tradicionales de construcción y sostenibilidad que proporcionan confort”, asegura Oriol Roselló, fundador y arquitecto de Bangolo.
Marta Sánchez: “Lo que más me fascinaba del castillo es que conservaba muebles de todas las generaciones que habían pasado por él: abuelos, padres e hijos desde el siglo Xll. Por ello, lo esencial en este caso era conservar la esencia, tal y como se había hecho anteriormente, manteniendo al máximo el mobiliario por su alto valor sentimental”
Detrás del diseño interior de este hotel se encuentra la interiorista Marta Sánchez, de M Proyectos, conocida por sus múltiples trabajos como SoHo House Barcelona. Con su estilo distintivo, ha creado el interior del hotel respetando al máximo los muebles originales del castillo familiar, restaurándolos y dándoles un toque contemporáneo que abrace el estilo rústico del ambiente. Los muebles históricos, cuidadosamente preservados a lo largo de los años, entran en combinación con elementos contemporáneos para crear un ambiente único.
Tal y como afirma Marta Sánchez, directora de proyectos y diseñadora de interiores de M Proyectos: “Lo que más me fascinaba del castillo es que conservaba muebles de todas las generaciones que habían pasado por él: abuelos, padres e hijos desde el siglo Xll. Por ello, lo esencial en este caso era conservar la esencia, tal y como se había hecho anteriormente, manteniendo al máximo el mobiliario por su alto valor sentimental”.
Situado en el pueblo de Peralada, el Castell de Vallgornera, los visitantes tienen fácil acceso a playas, pueblos medievales y una oferta de experiencias exclusivas para que los huéspedes puedan disfrutar de la zona. Desde clases de yoga particulares, catas de vinos en el Celler de Peralada y golf. La proximidad del hotel boutique a Figueres ofrece la oportunidad de sumergirse aún más en la vida y el arte de Dalí.
