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El pasado 18 de diciembre, Mosh realizó una renovación de su espacio. Lo que era un clásico en la Costa del Sol, ahora se reinventa gracias a Archidom Studio. El resultado: un ambiente contemporáneo donde lo urbano se fusiona con lo natural, creando una atmósfera dinámica.
El terciopelo otorga elegancia y estilo, mientras que los detalles en animal print en cojines y tapicerías añaden una dosis extra de actualidad y tendencia. Para completar el interiorismo, los tonos azul y naranja crean una combinación en la que conviven la serenidad y la energía.
Especial mención requieren los espejos envejecidos que aportan un aire nostálgico, mientras que el cobre, presente en las lámparas y marcos de espejos, da un toque de lujo sutil. El vidrio texturizado de la tras barra refuerza la sensación de profundidad y dinamismo.
El resultado: un ambiente contemporáneo donde lo urbano se fusiona con lo natural, creando una atmósfera dinámica
La mesa de baile, una de sus piezas más icónicas de Mosh, ha sido también reformulada. El tradicional policarbonato ha sido sustituido por ónix retroiluminado, un material natural que no solo aporta elegancia, sino que transforma el ambiente al llenar el espacio con luz. Gracias a su translucidez y a las variaciones tonales, el ónix tiene la capacidad de cambiar por completo la atmósfera, manteniendo viva la energía de la pista de baile.
La parte superior de la mesa está compuesta por una subestructura metálica que sostiene las piezas de ónix, retroiluminadas con LEDs en su interior, lo que crea un juego de luces envolvente con unas dimensiones aproximadas de 4,50x3,00 metros y un peso que ronda los 800-900 kg.
Incluso los baños de Mosh tienen su propia personalidad. Siguiendo la misma línea, se fusionan los colores naranja y azul, reflejados en los alicatados y las texturas. El revestimiento de óxido en el suelo recorre todo el espacio, creando una continuidad visual que conecta la sala con los baños.
Finalmente, la renovación se completa con la pérgola exterior. No solo es un espectáculo visual, sino también funcional, creando una conexión fluida entre el interior y el exterior. Las grandes luces amplían el espacio, creando una atmósfera que extiende la experiencia más allá de sus paredes.