Revista
El Massachusetts Institute of Technology (MIT) afirma que las empresas que explotan los recursos y conocimientos tecnológicos para innovar en su negocio, mejoran un 16% el margen neto. Los dispositivos de I+D son capaces de generar información valiosa de cara a la toma de decisiones, como prever la demanda, controlar el volumen de desperdicios o aumentar las ventas. En este sentido, la incorporación del big data y la inteligencia artificial en la restauración reduce un 30% el desperdicio de alimentos, según los resultados publicados por la Japan Weather Association (JWA).
Por otro lado, como afirma la empresa de software Last.app, disponer de una base de datos en la nube, aporta un valor añadido al uso de la información disponible, ya que se abre la posibilidad de acceder a ella y poder disponer de reportes del negocio, tienda online propia, escalabilidad y precio vs. herramientas por separado, en tiempo real. El hecho de implementar un software como este, sin duda, puede eliminar funciones fácilmente automatizables gracias a la digitalización.
Francisco Gea: “La transformación digital no aporta únicamente los aspectos anteriores, sino que además moderniza la restauración, la dota de nuevos productos y servicios, la abre a nuevos perfiles de consumidores y empleados; y permite abrirse paso en nuevos mercados”
Incorporaciones como el ya extendido QR para la consulta de la carta o pago a través del smartphone facilitan las comandas e incrementan la eficiencia laboral; así como la creciente tendencia de WhatsApp Business para mantener un contacto entre empresa y consumidor, consultar el catálogo online o gestionar los pagos de productos y servicios.
Los sistemas informáticos han sido traspasados a la restauración para facilitar todas sus acciones y disminuir los errores humanos. Last.app dispone de un software todo en uno para la integración digital de las tareas de la restauración: el hardware y el software permiten controlar las comandas y las reservas. Por otra parte, ayuda en la gestión online, la tienda online y el mercado. Al tener una base de datos y un pronóstico de la demanda se puede ajustar más la compra de productos. A su vez, facilita el delivery y las herramientas que encadena. Este sistema permite tener el control total del negocio y sus procesos; visible tanto para el empresario como para el cliente que ha realizado un pedido.
Igualmente, Last.app administra el establecimiento: los sistemas permiten gestionar grandes cantidades de información y así ofrecer informes personalizados acerca del negocio y facilitar el marketing y la propia gestión. Además, la atención que se presta mantiene el contacto con el cliente y facilita ayuda en caso de ser necesario y aporta un feedback.
Francisco Gea, director de marketing de Last.app, clarifica que “la transformación digital no aporta únicamente los aspectos anteriores, sino que además moderniza la restauración, la dota de nuevos productos y servicios, la abre a nuevos perfiles de consumidores y empleados; y permite abrirse paso en nuevos mercados”. Además, la integración de nuevas tecnologías beneficia tanto a los propietarios o clientes, como al mismo medio ambiente, ya que pronostica la demanda y entonces ajusta los pedidos para no sobrepasar la compra y malgastar comida.