El Travelodge Barcelona Poblenou, buque insignia de la cadena británica en España, ha desvelado el resultado de su reforma. Con sus 250 habitaciones renovadas y espacios comunes reimaginados, el hotel fusiona la esencia mediterránea con un estilo industrial.

Las habitaciones —disponibles en tipologías doble, doble familiar y twin— son el epicentro de esta transformación, combinando líneas limpias, paletas neutras y mobiliario multifuncional. Cada estancia incluye equipamiento premium: televisores de pantalla plana, minibar, plancha y tablas de planchar, además de enchufes USB/USB-C integrados en mesillas de diseño. Las habitaciones familiares, más amplias, incorporan sofás cama y espacios de almacenaje inteligente, ideal para estancias largas.

Con sus 250 habitaciones renovadas y espacios comunes reimaginados, el hotel fusiona la esencia mediterránea con un estilo industrial

Los baños destacan por sus platos de ducha planos con mamparas de cristal templado, flexos de ducha de última generación y suelos de tarima. Además, el hotel ha reforzado su compromiso con la accesibilidad, ofreciendo baños adaptados con barras de apoyo y espacios ampliados para garantizar comodidad a todos los huéspedes.

Más allá de las habitaciones, el hotel ha llevado a cabo una reforma integral de sus zonas comunes. El lobby y la recepción, rediseñados como un living urbano, presentan altos techos, iluminación cenital y mobiliario de líneas escultóricas en tonos arena y grafito.

El desayunador ofrece un buffet libre con fruta fresca, bollería artesanal, embutidos ibéricos y cafés especiales.Invita a comenzar el día en un entorno luminoso, donde predominan las mesas comunitarias y los detalles en cerámica esmaltada.

Por su parte, el 85 Bar Café —firmado por el estudio Harrison— apuesta por un concepto moderno y acogedor. Con una carta variada que abarca desde desayunos hasta cenas, el 85 Bar Café ofrece opciones gastronómicas asequibles tanto para huéspedes como para clientes externos e incluye un espacio co-working con enchufes y zonas silenciosas.

La reforma no solo ha priorizado la estética, sino también la eficiencia. Sistemas de climatización inteligente e iluminación LED de bajo consumo reflejan un compromiso ecofriendly que no renuncia al lujo discreto.

Enclavado en Poblenou, a 10 minutos de la playa de Bogatell y rodeado de hubs tecnológicos, el hotel se posiciona como una opción para viajeros que buscan desconectar sin renunciar a la esencia de Barcelona.