Grupo Dihme presenta su nueva enseña: Colmado Parranda, que entra al mercado con su primer restaurante en pleno barrio Salamanca, concretamente en la calle Goya, justo al lado del Wizink Center.
Se trata de la reinterpretación de un “colmado de los de siempre, donde se reunían nuestros abuelos, se tomaban el aperitivo y hacían la compra del día, reconvertido ahora en espacio de picoteo, pero con un toque gamberro. Basado en productos de alta calidad, conservas gourmet, chacinas, platos variados, un nuevo concepto ideal para disfrutar en el local o para llevar a casa”, afirman sus responsables.
Colmado Parranda bebe de todo lo aprendido con El Kiosoko, la otra marca del grupo, y viene a completar la oferta del barrio con esta apuesta
Colmado Parranda bebe de todo lo aprendido con El Kiosoko, la otra marca del grupo, y viene a completar la oferta del barrio con esta apuesta: “Una vuelta a los orígenes, al valor del producto y el poder del mercado, con una esencia de la España de siempre, pero con aire gamberro que no deja indiferente a nadie”, explica Daniel Sala, CEO del Grupo.
Tanto es así que han elegido Madrid para su puesta de largo. Se trata de una oferta con un toque tradicional, pero reinterpretado en su justa medida, para que todo funcione equilibradamente y sin estridencias: una carta de platos honestos con productos auténticos, que destacan por el valor de la propia materia prima, y con una oferta muy amplia en vinos con más de 120 referencias.
El espacio, en el que se observan, a la vista y con presencia destacada, multitud de embutidos, conservas y vino, mucho vino, se completa con distintas rotulaciones que nos presentan aspectos de la carta y del producto, de la forma en la que se mostraban en las “tascas” de siempre.
Su carta equilibra las recetas tradicionales (raciones de embutido selecto, croquetas, ensaladilla rusa), con especialidades de la casa (pimientos del piquillo rellenos, mojama o cecina de wagyu), aperitivos (gran variedad de gildas, conservas o jamón cortado allí mismo) y platos principales clásicos e como aguachile de navajas, el tartar de chacinas, lomo de orza o carrillera de ternera preparada a fuego lento.
