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En la última edición de la World Class Competition by Diageo Reserve, por primera vez una mujer, Jennifer Le Nechet, se hizo con el título de la Mejor Bartender del Mundo. La bartender, a quien habitualmente se puede encontrar elaborando cócteles detrás de la barra del Café Moderne de París, sorprendió a los jueces creando espectaculares, sabrosos y originales cócteles en el bar pop-up que creó como último reto de la competición. Pero Jennifer no es un caso aislado. De los casi 10.000 bartenders que participaron en la competición, siete mujeres resultaron finalistas.
Una de ellas fue Joan Samia; empezó en el mundo de la coctelería hace siete años en el primer restaurante de Kenia que introdujo cócteles en su carta. Es una pionera del desarrollo de estas tendencias en Kenia y su foco actual se centra en la talla de hielo. Otra de las que consiguió llegar a Miami fue la representante eslovaca, María Debnarova. Su interés por la coctelería comenzó con un acercamiento profundo a las raíces del sabor, hasta conseguir combinar a la perfección ingredientes de lo más inusuales. Es partidaria de apostar por los ingredientes locales y de temporada. Además está muy involucrada en inspirar a otras mujeres para participar en competiciones.
La clasificada española, Adriana Chía, empezó en el mundo de la coctelería creativa cuando estudiaba diseño gráfico, y lo compatibilizaba con trabajos en hostelería. Su punto fuerte en la barra es utilizar elementos y técnicas muy visuales que la ayudan a crear una historia detrás de cada bebida. Adriana se quedó a las puertas de la final de Miami, pero consiguió plasmar su personalidad durante todas las pruebas de la World Class Competition.
La inspiración de la participante suiza, Sophie Larrouture, proviene de sus viajes y experiencias al conocer nuevas culturas. Se fija en bartenders de diferentes países. Es una apasionada de contar una historia detrás de sus creaciones para poder generar nuevas experiencias y emociones en sus clientes. Por su parte, Laura Duca abandonó su país de origen, Rumanía, para comenzar una aventura laboral en Dubai, donde se enamoró de todo lo que implica la coctelería: conocer gente, sus historias y poder hacer con sus creaciones que sus clientes disfruten más de las experiencias de la vida.
Por último, desde Tailandia destaca Palin Sajjanit, quien se convirtió en bartender hace 4 años, y tan solo un año después se convirtió en Bar Manager. Palin ve que el mundo de los cócteles está volviendo a los clásicos pero usando ingredientes únicos y contando historias sobre la forma en la que cada cóctel es elaborado.