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En el corazón de Santa Ponsa, Calviá, a mediados de marzo, Kimpton Aysla Mallorca volverá a abrir sus puertas. Este exclusivo resort, el primero del grupo Kimpton en Europa, presenta un jardín compuesto exclusivamente por plantas autóctonas que no solo resalta la biodiversidad de Mallorca, sino que también promueve la sostenibilidad gracias a la baja demanda de riego de las especies mediterráneas.
El resort cuenta con 79 habitaciones y suites diseñadas para reflejar la belleza natural de la isla. Distribuidas alrededor de patios mallorquines, estas habitaciones combinan tonos neutros y materiales naturales con acentos turquesas que evocan las aguas cristalinas del entorno. Cada habitación dispone de balcón privado con vistas panorámicas.
El área de wellness del resort destaca por sus actividades diarias dirigidas, como aquagym, cycling, yoga y pilates. Estas dos últimas suelen llevarse a cabo al aire libre, en los jardines del hotel, brindando a los huéspedes la oportunidad de conectar con la naturaleza mientras cuidan su cuerpo y mente. Además, todas las habitaciones están equipadas con esterillas de yoga, fomentando la práctica individual desde la terraza privada o en los espacios abiertos del jardín.
Siguiendo la tradición de los hoteles Kimpton, cada tarde a las 17:00 tiene lugar la social hour, una oportunidad para que los huéspedes disfruten de una copa de vino local mientras comparten experiencias y crean conexiones. Esta filosofía de interacción también está presente en los talleres grupales del hotel, que incluyen pintura, catas de vino y creación de abanicos, diseñados para estimular la creatividad y acercar a los visitantes a la cultura local.
Ubicado en el nacimiento de la Serra de Tramuntana, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y rodeado de playas, el resort es un punto de partida ideal para actividades al aire libre. El departamento de Experiencia del Huésped organiza rutas de senderismo por la sierra y paseos en bicicleta por los alrededores, permitiendo a los visitantes descubrir la riqueza natural y cultural de la isla.
Además, durante el verano, el hotel ofrece un programa de actividades adaptado para niños, como talleres de manualidades y juegos acuáticos. Esta propuesta garantiza que tanto pequeños como adultos disfruten de unas vacaciones relajantes. Además, la separación entre piscina familiar y piscina adults-only (+18) asegura espacios pensados para cada necesidad.
La propuesta culinaria de Kimpton Aysla Mallorca parte de Saba, donde los ingredientes frescos se combinan con técnicas asiáticas para ofrecer una experiencia gastronómica. Saba Bar & Bodega, es el exclusivo bar indoor-outdoor, donde disfruta de pescado fresco, carnes de primera calidad y una propuesta que celebra los sabores de la región. En el caso de Zayt Pool Club, su nombre, que significa “aceite” en árabe, refleja su esencia: platos frescos, ligeros y llenos de sabor, hechos con producto local: poke, una pizza o un cóctel junto a la piscina.
Kimpton Aysla Mallorca reafirma su compromiso con la sostenibilidad y la comunidad local, adoptando prácticas responsables y respetuosas con el entorno. Además, el resort es pet-friendly, asegurando que las mascotas sean bienvenidas.