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La Máquina anuncia la reapertura del restaurante Puerta 57, situado en el Estadio Santiago Bernabéu. Veinte años después de su inauguración, el espacio de Puerta 57 se divide en dos plantas con más de 1.000 metros cuadrados, incluyendo la sala principal con vistas directas al campo, la zona interior de mesas altas con la barra “Cibeles”, los privados y reservados, la terraza, las cavas y los espacios para operaciones. La mayoría de estos espacios cuentan con vistas al terreno de juego del Santiago Bernabéu.
Puerta 57 mantiene su abastecimiento directamente en origen, a través de productores, lonjas y mercados; las elaboraciones tradicionales y sencillas que presentan el producto sin enmascararlo. La carta de este espacio mantiene, en líneas generales, una propuesta como las del resto de localizaciones repartidas por Madrid y el restaurante cuenta con un aforo de más de 400 comensales no solo para las comidas diarias, sino también para la celebración de cualquier tipo de evento, además de una terraza que abrirá próximamente y cocina ininterrumpida.
La mayoría de estos espacios cuentan con vistas al terreno de juego del Santiago Bernabéu
Destacan en este espacio nuevas recetas como el Frit de langosta al estilo Formentera, un plato típico de Baleares pero con el sello de La Máquina; el Salpicón de bogavante azul, en pieza entera; o el Arroz con tuétano; el Bacalao negro salvaje de Alaska maridado en miso; la Tortilla especial con callos a la moda de Oviedo; o el Cocido de La Máquina en tres vuelcos. No faltan tampoco los clásicos de La Máquina como son sus mariscos y pescados al peso, la clásica Ensaladilla rusa La Máquina, los Chanquetes con huevos fritos y ensalada de pimientos, junto a otras opciones para compartir como la Tortilla abierta de patata y alcachofas.
Otros platos destacados que encontramos en la carta de Puerta 57 son sus pescados salvajes por pieza, traídos a diario desde las distintas lonjas de España – bajo disponibilidad según el estado de la mar – como Lubina, Rapito, Lenguado, Besugo, Virrey, o la Lubina frita, entera, con los lomos cortados en taquitos servidos sobre su propia espina. Para finalizar, en la parte dulce destacan el Flan casero con leche de oveja Latxa del Valle de Ulzama o la Tarta casera de queso.
Además de todas estas propuestas para disfrutar con un concepto más formal, Puerta 57 cuenta con el protagonismo de su barra “Cibeles”, en la que disfrutar de una manera más distendida de su propuesta de pinchos – de steak tartar, tartar de atún o ensaladilla Ilustrada–, ostras, aperitivos, una nueva tortilla de callos, y otras recetas típicas de la casa.
Puerta 57 cuenta con una bodega con más de 150 referencias provenientes de diferentes denominaciones de origen, así como otras más desconocidas para aquellos que busquen arriesgar. Entre las peculiaridades de su bodega destaca la cata vertical de varias bodegas de vinos, entre ellas Pago de Carraovejas.